Mecanismo de defensa y duelo en la EM
Negación: en Psicología, mecanismo de defensa consistente en enfrentarse a los conflictos negando su existencia o su relación o relevancia con uno mismo.
Todos utilizamos este recurso que nuestra mente, usuaria de atajos mentales y esquemas (heurísticos) por excelencia, posee innatamente.
Los esquemas mentales nos ayudan a economizar energía y a hacer más fácil la realidad y nuestro día a día.
Sí. La realidad es dura. Una verdad de perogrullo, sí. Pero tenía que recordarlo de nuevo.
Un profesor mío dijo un día: «Los depresivos ven la realidad tal y como es»
Esa frase se me quedó grabada a fuego. Es la realidad.
Yo que creía que todos estos atajos mentales, esquemas y patrones que todos repetimos eran en su mayoría dañinos y poco adaptativos. Qué equivocada estaba.
No digo tampoco que todos sean buenos, pero son necesarios en su justa medida.
Quiero hablar de la negación porque tiene relación con la EM y ahora vereis por qué:
Cuando se producen pérdidas, ya sean de objetos, pérdidas de personas conocidas y/o queridas o pérdidas en la salud, en el proceso de duelo es necesario la negación. ¿Por qué? Porque amortigüa el dolor y prepara al cerebro, que lleva muy mal eso de perder algo o a alguien, para afrontar esa nueva situación.
Nos sume en un estado de shock, de incredulidad y nos lleva poco a poco, con dolor pero a nuestro ritmo, a que nos demos cuenta de que algo o alguien nos falta.
Cuando padecemos una enfermedad, sufrimos la pérdida de nuestra salud y por lo tanto pasamos por ese proceso de duelo.
Seguimos siendo los mismos, pero nuestras prioridades han cambiado.
Con la Esclerosis Múltiple tenemos que aprender a vivir más relajados y evitando el estrés, con una alimentación más sana y con las limitaciones, cognitivas o físicas, que nos haya regalado nuestra querida amiga la EM.
No todos aceptamos estos cambios que hay que realizar.
Sí, me incluyo en esta afirmación, porque yo, como muchos de vosotros, todavía me muestro reticente a creer que padezco esta enfermedad.
Porque es difícil, no hay que negarlo. Dejar atrás todo lo que antes eras y hacías no es para nada fácil.
No aceptar lo que nos pasa es un mecanismo de defensa que nos va a ayudar posteriormente, a su debido tiempo y si el proceso sigue su curso normal, a aceptar que todo ha cambiado.
Hay que disfrutar de ese cambio.
Un momento… ¿disfrutar? Te has equivocado Miriam, no se disfruta de esto. Pues sí, sí se puede.
Los cambios son inevitables y constantes en la vida. Cuando tenemos que cambiar de ciudad, nos ascienden en trabajo o cambiamos totalmente de empleo, al principio cuesta ¡claro!, pero es una oportunidad de conocer gente nueva, aprender nuevas materias, de aprender a hacer lo mismo de antes pero de otra manera, y un largo etc. de oportunidades a nuestro alcance.
¿No pasa lo mismo con la Esclerosis?
Conocemos gente nueva con nuestras mismas inquietudes y miedos y nos apoyamos entre nosotros, los lazos que nos unían con nuestra familia, amigos o quienes nos ayuden en esos momentos, se estrechan más todavía. Tenemos conocimientos de cómo funciona nuestro cerebro y cosas de las que, generalmente, no hubiéramos buscado información. Aprendemos cómo hacer las cosas de otra manera y eso nos hace crecer.
Yo aprendí a usar más la parte izquierda de mi cuerpo cuando se me paralizó la derecha. Y todos los días me sorprende lo bien que sé monitorizar mis avances o mis pasos atrás.
Sí, es una mierda absoluta tener esclerosis múltiple y crea mucha incertidumbre, pero tenemos dos opciones: lamentarnos, cabrearnos y negar la mayor o aprender cada día de las pequeñas cosas y valorar el apoyo de la gente que nos quiere.
¿Cuál eliges?
Comentarios
Muy chula la entrada,se nota que eres psicóloga
Jajaja una barre para casa ;). Es interesante entender qué pasa en nuestra cabeza y si eso es normal o no. Seguiré escribiendo sobre Psicología, me siento muy cómoda haciéndolo y parece que gusta 🙂